MarcosR
Miembro Conocido
Hundida entre las brasas
que a medio crepitar
ha dejado el ocaso
temblando en la rompiente
sin saber despedirse,
una historia perece.
Designios de los tiempos
que se arrugan de espanto
y avanzan gravemente.
a punto de extinguirse
rodando por los años.
Escudo de emociones
que todo lo arrasaron,
henchido de dobleces
y silencios crispados
golpeando la garganta,
exhausto de seguir,
un corazón se calma.
Las cortinas disputan
los espacios vacíos,
abiertos al despojo
de las resignaciones necesarias.
Las llaves se han perdido
y las puertas devienen...
Sólo las soledades
se han quedado olvidadas
en el sitio preciso
de sus apariciones consteladas.
Debajo de los pisos
una ciénaga irrumpe,
y un corrosivo aliento
empaña las ventanas...
que a medio crepitar
ha dejado el ocaso
temblando en la rompiente
sin saber despedirse,
una historia perece.
Designios de los tiempos
que se arrugan de espanto
y avanzan gravemente.
a punto de extinguirse
rodando por los años.
Escudo de emociones
que todo lo arrasaron,
henchido de dobleces
y silencios crispados
golpeando la garganta,
exhausto de seguir,
un corazón se calma.
Las cortinas disputan
los espacios vacíos,
abiertos al despojo
de las resignaciones necesarias.
Las llaves se han perdido
y las puertas devienen...
Sólo las soledades
se han quedado olvidadas
en el sitio preciso
de sus apariciones consteladas.
Debajo de los pisos
una ciénaga irrumpe,
y un corrosivo aliento
empaña las ventanas...