lma empuja a la pluma viajera;
esperando siempre que vinieran;
unas manos trayendo rosas
persistente en su peregrinar;
la pluma muy perseverante
ella no deja nunca de sembrar;
amor entre toda la gente:
Querida amiga Paloma. la vida de por si es como una escalera, a veces estamos
en el último escalón y otras veces en el de abajo. Hermoso poema reflexionado.
Con amistad y cariño Abrazos