Ciertamente, vienes en esas tardes leves
cual manso ruido de metálica sombra
a enmudecer el alma.
Voz sin contorno, que se acerca
vaga, temblorosa,
delgado suspiro de brisa antigua,
irrescatable.
Ciertamente,es una voz de fondo,
que guiña la mueca a la espera
que abraza y besa...
breve certeza...