DR Jose Roberto Hernandez
Miembro Conocido
Cosas viejas
Ahondo un poquito en tu mirada
Y tus colores gritan un marrón desesperado
Verbo solemne en noche sin reparos,
Candida pupila que arde cuando pasas a mi lado.
Vivimos arte a diario en nuestros pasos,
Como el pasado que nos enseña de sus huellas
Es aluvión de curvas y retazos,
Es piel soberbia y un poquito de tus ratos.
Son curvas suaves, movimientos dulces,
Son barandas de metal y un poco de sueño,
Es un mar inmenso de poesía y un regalo;
Que al mundo regalas con tus abrazos y tus besos
Cuando el amor es suficiente para respirar
Y cada aliento a la vez crece y florece;
Se escuchan chispas de razones y una verdad,
Que disfruto en las mañanas al tenerte
Cuando el amor alcanza cimas de tonta igualdad
Y los derrumbes suceden al acariciarte;
Sulen sembrar semillas tontas en El escorial;
Y aun ahí germina el sueño eterno de tenerte
Si el duende verde salta siempre en tu ventana,
No significa que han parido una mañana;
Es también la inequívoca señal; de un brillo nuevo
Que te aguarda mirando el reloj aquí en mi cama.
DR Jose Roberto Hernandez (Vampi)
Ahondo un poquito en tu mirada
Y tus colores gritan un marrón desesperado
Verbo solemne en noche sin reparos,
Candida pupila que arde cuando pasas a mi lado.
Vivimos arte a diario en nuestros pasos,
Como el pasado que nos enseña de sus huellas
Es aluvión de curvas y retazos,
Es piel soberbia y un poquito de tus ratos.
Son curvas suaves, movimientos dulces,
Son barandas de metal y un poco de sueño,
Es un mar inmenso de poesía y un regalo;
Que al mundo regalas con tus abrazos y tus besos
Cuando el amor es suficiente para respirar
Y cada aliento a la vez crece y florece;
Se escuchan chispas de razones y una verdad,
Que disfruto en las mañanas al tenerte
Cuando el amor alcanza cimas de tonta igualdad
Y los derrumbes suceden al acariciarte;
Sulen sembrar semillas tontas en El escorial;
Y aun ahí germina el sueño eterno de tenerte
Si el duende verde salta siempre en tu ventana,
No significa que han parido una mañana;
Es también la inequívoca señal; de un brillo nuevo
Que te aguarda mirando el reloj aquí en mi cama.
DR Jose Roberto Hernandez (Vampi)