Paloma Pérez
Moderadora del Foro Poesía Infantil

La puesta de sol hermosa,
contempla la violinista.
cuyo violín ya no toca,
su música calló herida.
Observa el mar y sus olas
y la magnífica vista.
Al atardecer añora
sentirse y verse querida,
aunque ella se siente sola
brota la luz sanativa
del rayo de sol que toma
calmando su alma dolida,
animando a la cantora
a cantar su melodía.