Fuiste la esencia amorosa
que se acopló a la mía,
el carruaje bello, fantástico
para recorrer esta vida,
fuiste sangre que latiendo
combatió y cerró heridas,
paloma mensajera y blanca
susurro de palabras tibias,
caricia que encendió mi rostro
entibiando mis entrañas.
Tu fuiste el colibrí de mi...