Yolvi Efrain Cauro Mendes
Miembro Conocido
[h=3][/h]
He venido desocupándome de ciertas cosas, nadie esperara la declaración jurada, desde aquel día en que lo dividieron todo[1]. He venido desocupándome desde hace tiempo, desde que una mujer expropió la luz de las alturas, aquella que solo pueden alcanzar los juglares, esa mujer se ha expropiado de todo a cambio de aquel avión de sombras en el que quiso depositar en mí sus ilusiones y volar con ellas. El asfalto y las penumbras han sido testigo de toda la congregación de los vientos, deseos en nubes. Fue así que comenzó todo, la soledad haciéndome estragos nauseabundos que más tarde fueron vicios, delirios y otras docenas de adjetivos… Esa mujer ha estado cerca siempre y, cuando le dije que debía estar lejos, se molestó. Fue entonces que se dió cuenta que desangraba y que yo partí hacia no sé donde bajo aquella arista atormentadísima. Sin embargo, yace aquí a mi lado con su bata negra y su hambre de muchos días. Yo se los puedo jurar, que vengo desocupándome de ciertas cosas, de todo, lo demás y la noche. Está dicho. Esta es la evidencia.
[HR][/HR][1] Carlos Varela
He venido desocupándome de ciertas cosas, nadie esperara la declaración jurada, desde aquel día en que lo dividieron todo[1]. He venido desocupándome desde hace tiempo, desde que una mujer expropió la luz de las alturas, aquella que solo pueden alcanzar los juglares, esa mujer se ha expropiado de todo a cambio de aquel avión de sombras en el que quiso depositar en mí sus ilusiones y volar con ellas. El asfalto y las penumbras han sido testigo de toda la congregación de los vientos, deseos en nubes. Fue así que comenzó todo, la soledad haciéndome estragos nauseabundos que más tarde fueron vicios, delirios y otras docenas de adjetivos… Esa mujer ha estado cerca siempre y, cuando le dije que debía estar lejos, se molestó. Fue entonces que se dió cuenta que desangraba y que yo partí hacia no sé donde bajo aquella arista atormentadísima. Sin embargo, yace aquí a mi lado con su bata negra y su hambre de muchos días. Yo se los puedo jurar, que vengo desocupándome de ciertas cosas, de todo, lo demás y la noche. Está dicho. Esta es la evidencia.
[HR][/HR][1] Carlos Varela
