gonzalo
Miembro Conocido
AMOR CELESTIAL
El amor es cadencia,
en la justicia,
en la sinceridad,
en la unión de puntos de vistas.
Entra un aroma celestial
en las ventanas de nuestra alma
y bailan los sentidos en el dulce hogar.
El baile es de rosas
con perfumes cadenciosas.
Bendiciones derramadas,
pluma de garza que se escurre hasta el corazón;
El amor es lluvia de besos, mano de seda;
manto sagrado, del todopoderoso,
del creador.
El amor celestial que tiene es incomparable,
sus manos son terciopelo bañado de oro
y el amor son cristales que se expanden
en cada pedazo del alma.
Escribe melodías con su pluma
en donde te armoniza los chacras
con sentido del humor.
El amor es en fin
tan incomparable como el cielo,
como un océano infinito de estrellas;
es el oculto idioma de un niño que nace
y la alegría eterna de un sol que despierta.
Es la historia, la esencia pura
de la vida, la existencia, la nuestra.
Lo celestial y lo nuestro es la verdad
de la casa arreglada,
y el amor es como grutas transparentes,
y adormece la oscuridad
para evidenciar el Sol Divino.
Es el nuevo ser, esperado.
Esa vocecita inocente
que siembra esperanza,
tan transparente como una gota de agua,
tan dulce como un pedazo de cielo;
así es el amor que nace, tan celestial,
en toda su esencia.
VERITO-BOLIVIA
GONZALO PEREZ-MÉXICO
El amor es cadencia,
en la justicia,
en la sinceridad,
en la unión de puntos de vistas.
Entra un aroma celestial
en las ventanas de nuestra alma
y bailan los sentidos en el dulce hogar.
El baile es de rosas
con perfumes cadenciosas.
Bendiciones derramadas,
pluma de garza que se escurre hasta el corazón;
El amor es lluvia de besos, mano de seda;
manto sagrado, del todopoderoso,
del creador.
El amor celestial que tiene es incomparable,
sus manos son terciopelo bañado de oro
y el amor son cristales que se expanden
en cada pedazo del alma.
Escribe melodías con su pluma
en donde te armoniza los chacras
con sentido del humor.
El amor es en fin
tan incomparable como el cielo,
como un océano infinito de estrellas;
es el oculto idioma de un niño que nace
y la alegría eterna de un sol que despierta.
Es la historia, la esencia pura
de la vida, la existencia, la nuestra.
Lo celestial y lo nuestro es la verdad
de la casa arreglada,
y el amor es como grutas transparentes,
y adormece la oscuridad
para evidenciar el Sol Divino.
Es el nuevo ser, esperado.
Esa vocecita inocente
que siembra esperanza,
tan transparente como una gota de agua,
tan dulce como un pedazo de cielo;
así es el amor que nace, tan celestial,
en toda su esencia.
VERITO-BOLIVIA
GONZALO PEREZ-MÉXICO