Marcial el forjetano
Nuevo Miembro
Vedlos allí, traidora y cruda parca,
volar en una barca mis despojos
con puerto el firmamento.
Llevad conmigo anclada la fortuna,
nunca me fuera alguna con mis ojos
ni tan solo un momento.
Presente fría brisa mueve el arca,
bandera negra marca mis congojos
y en todo lo que viera inoportuna
mi vida, toda en una, va en enojos.
En cuna de la parca, baja el barco
y traza un arco al sumergir la proa
profundo y hacia el fondo.
Vedlos allí los gritos y el pesar,
llorando que ya el mar por fin corroa,
su malvivir hediondo.
Diera con vos final al arrebato,
el heroico naufragio en la neblina
tras ver la vela del bajel fantasma.
Fría tormenta en mar abierto plasma
su manto azul, corriente trae ruina
y allí, a lo lejos, cuenta su relato.
¿Quién pudiera volverme tan dichoso
y hacerme ver triunfante,
por un pequeño instante,
de ver luchar al mal tan doloroso?
volar en una barca mis despojos
con puerto el firmamento.
Llevad conmigo anclada la fortuna,
nunca me fuera alguna con mis ojos
ni tan solo un momento.
Presente fría brisa mueve el arca,
bandera negra marca mis congojos
y en todo lo que viera inoportuna
mi vida, toda en una, va en enojos.
En cuna de la parca, baja el barco
y traza un arco al sumergir la proa
profundo y hacia el fondo.
Vedlos allí los gritos y el pesar,
llorando que ya el mar por fin corroa,
su malvivir hediondo.
Diera con vos final al arrebato,
el heroico naufragio en la neblina
tras ver la vela del bajel fantasma.
Fría tormenta en mar abierto plasma
su manto azul, corriente trae ruina
y allí, a lo lejos, cuenta su relato.
¿Quién pudiera volverme tan dichoso
y hacerme ver triunfante,
por un pequeño instante,
de ver luchar al mal tan doloroso?
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