No hagamos del amor una palabra...

[Francisco Escobar Bravo]

No hagamos del amor una palabra
ni un acto conyugal, únicamente.
Costumbre veterana es del que ansía
que jura al ser que ansía amarle siempre.
Y luego queda todo en el olvido,
se convierte en cariño si se puede
llamar de esta manera a la costumbre
de, despertando al alba, otra vez verle.
Se alcanza la vejez tras una vida
pasada en compañía y sí, se quiere.
Mas, sé sincero y dile a tu conciencia
adónde fue el amor y si es que vuelve.
Sospecho yo que no, que ya es mentira,
que es simple convivir, que son las Leyes
aquellas que en el fondo nos obligan
e impiden que rompamos muchas veces.
O la palabra dada, el juramento,
pensando que al jurar fuimos decentes.
Que muchos no lo fueron y olvidaron...
¿Juré? Sí. He de cumplir hasta la muerte.
Y luego Dios dirá, si se la lleva.
Que no quisiera yo, mejor me lleve,
tenerla entre mis brazos yerta, inmóvil.
Mejor prefiero, sí, que ella me observe
en forma tal, insisto, pues me aterra
y al alma mil temores le sugieren
pensar en que la niña que amé tanto
por mucho que no quiera se me muere.​

 

[José Luis Blázquez]

Precioso romance heroico. Me llama la atención los 4 últimos versos, porque es el último -y no el penúltimo- el que sigue la rima "ee".

Un abrazo.

 

[Caballo Negro]

Un hermoso poema Francisco .....Gracias amigo por participar ...un abrazo y gracias por participar......

 

[Francisco Escobar Bravo]

No, José Luis, es que faltaba un verso. Se conoce que algo le ocurre al ordenador, que copia cómo quiere.
Perdón, pero se me ha dado en más casos. Incluso en Facebook.
Espero que ahora quede totalmente correcto.
Abrazos, querido amigo.

 

[Francisco Escobar Bravo]

Muchas gracias a ti por leerme, querida Maru.
Me alegra que te haya gustado, amiga.
Besos.

 

[Tony_Drüms]

No hagamos del amor una palabra
ni un acto conyugal, únicamente.
Costumbre veterana es del que ansía
que jura al ser que ansía amarle siempre.
Y luego queda todo en el olvido,
se convierte en cariño si se puede
llamar de esta manera a la costumbre
de, despertando al alba, otra vez verle.
Se alcanza la vejez tras una vida
pasada en compañía y sí, se quiere.
Mas, sé sincero y dile a tu conciencia
adónde fue el amor y si es que vuelve.
Sospecho yo que no, que ya es mentira,
que es simple convivir, que son las Leyes
aquellas que en el fondo nos obligan
e impiden que rompamos muchas veces.
O la palabra dada, el juramento,
pensando que al jurar fuimos decentes.
Que muchos no lo fueron y olvidaron...
¿Juré? Sí. He de cumplir hasta la muerte.
Y luego Dios dirá, si se la lleva.
Que no quisiera yo, mejor me lleve,
tenerla entre mis brazos yerta, inmóvil.
Mejor prefiero, sí, que ella me observe
en forma tal, insisto, pues me aterra
y al alma mil temores le sugieren
pensar en que la niña que amé tanto
por mucho que no quiera se me muere.​

Maravilloso, y fuerte trabajo, estimado Francisco. Que Romance, que sentir, que lamentable y hermoso expresar, el que tiene. Un agrado leerte Poeta. Un abrazo, Drümz.

 

[Francisco Escobar Bravo]

Muchas gracias, amigo Drümz. Me alegra que te haya gustado, compañero.
Abrazos.