Víctor
Moderador de Poesía Jocosa
En una combi repleta,
un fulano se trepaba,
y en una mano llevaba
una pesada maleta.
De esa maleta salía
un olor muy pestilente,
que haciendo gestos olía,
en el interior, la gente.
Entonces un pasajero
sospechó con gran porfía
del mentado maletero.
y al minibús detenía.
Se fue a ver a un policía
que se hallaba en el crucero.
porque ya no se podía
soportar hedor tan fiero.
Y luego de forma inquieta
enteró a ese policía,
del tufo de la maleta
que aquel fulano traía.
En el acto el policía
dijo al tipo, sin espera,
que aquella maleta abriera
para ver qué contenía.
Y luego con gran rudeza
la maleta revisó,
donde asombrado encontró
en su interior dos cabezas.
El poli, con desparpajo,
en un papel las enrolla:
una era cabeza de ajo
y la otra de cebolla.
un fulano se trepaba,
y en una mano llevaba
una pesada maleta.
De esa maleta salía
un olor muy pestilente,
que haciendo gestos olía,
en el interior, la gente.
Entonces un pasajero
sospechó con gran porfía
del mentado maletero.
y al minibús detenía.
Se fue a ver a un policía
que se hallaba en el crucero.
porque ya no se podía
soportar hedor tan fiero.
Y luego de forma inquieta
enteró a ese policía,
del tufo de la maleta
que aquel fulano traía.
En el acto el policía
dijo al tipo, sin espera,
que aquella maleta abriera
para ver qué contenía.
Y luego con gran rudeza
la maleta revisó,
donde asombrado encontró
en su interior dos cabezas.
El poli, con desparpajo,
en un papel las enrolla:
una era cabeza de ajo
y la otra de cebolla.
muy bueno