Mujer, ayer tan joven y hoy señora
aún en mi recuerdo, en la aurora
que para amar el tiempo vuela
lo sentí hoy al verte, como abuela.
Siempre hay tiempo para morir
pero para amar, el tiempo vuela
lloré al ver a una mujer partir
y hoy, al verte ejercer de abuela.
El tiempo, el que socava el cuerpo
que si no aprovechas, estás muerto
el que perdimos, buscando la luna
el que hoy se va, balanceando la cuna.
El tiempo, de ese niño que no es nuestro
el que te hace tan feliz y a mi maestro
que sirve a otros y a nuestro recuerdo
por ser tu tan cobarde y yo tan lerdo.
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