Carlos Ariel Albornoz
Miembro Conocido
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
La risa en el agua estalla:
—¡deje amigo la pantalla,
que ha perdido la toalla
y se acaba de bañar!
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
Mas una andaluza esbelta,
con la mudanza y su vuelta,
un estribillo le suelta
nacido en tierras de Omar:
—¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
¡Ay, qué vergüenza y qué pena!
si al caminar en la arena
junto a esta bella morena,
usted cayese en el mar.
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
En el camino empinado
puede bajar revolcado,
¡cuerpo a tierra! cual soldado
del servicio militar.
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
Y al no ver un escalón,
tal vez limpie algún salón
restregando el pantalón,
deslizándose al azar.
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
Si por la calle camina
y a la vuelta de la esquina
lo saluda una vecina,
es cortés el contestar.
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
El tipo se pone rojo
y sin levantar ni un ojo
le responde del enojo:
—¡Deje usted ya de cantar!
¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
Y sin que el pobre lo note
los turistas en un brote
ya jocoso, el estribote
se atreven a corear:
— ¡Guarde ahora el celular
porque puede tropezar!
Carlos Ariel Albornoz
