Seguir siendo lo dulce, lo estupendo, lo raro
poner la nota vívida, con gesto indolente
donde todo sonría, maravillosamente,
abrir el horizonte, como un estuche claro.
Darse ya enteramente, y darse sin medida
ser fruta, ser caricia, ser el agua y la fuente,
dejar fluir la salvia, como rico...