La noche se va cerrando , cual capullo
en dos espigas de plata, se refleja,
noche de torsos yacentes, inmutables
por donde correrá el agua de la fuente.
Allí juegan y dormitan, sustentado
las mariposas, con sus estocadas
hay sábanas de terciopelo blancas,
revueltas sobre fulgores de encaje...