Soñé ayer con colores,
las imágenes se hacían cada vez más claras,
los colores más vivos,
luego los sonidos,
después, de a pocos,
el tacto se hacía más fino, cada vez.
Estabas allí,
recostada, mirándome;
sonriendo;
y en ese gesto cómplice
apoyaba mi silencio,
observándote,
comenzando a...